Fumar es una de las actividades más peligrosas que el ser humano realiza de forma voluntaria, ya que esta práctica deteriora las vías respiratorias y los pequeños sacos de aire que hay dentro de los pulmones. El daño causado por el humo del tabaco comienza desde que se consumen los primeros cigarrillos y el deterioro pulmonar se hace cada vez más evidente conforme pasan los años. Una de las consecuencias más graves de fumar es la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), por lo que los pacientes necesitan de una terapia de oxígeno portátil para tener una mejor calidad de vida.

Fumar es una de las actividades más dañinas para las funciones respiratorias porque los daños comienzan desde el principio y continúan empeorando conforme la persona sigue consumiendo tabaco. Si bien es cierto que pueden pasar varios años antes de que se comiencen a notar problemas realmente serios que permitan detectar una enfermedad pulmonar, pero el daño causado por esta práctica es irreversible en la mayoría de los casos.

¿Qué es la EPOC y por qué se necesita terapia de oxígeno?

La enfermedad pulmonar obstructiva (EPOC) es el nombre que los médicos utilizan para referirse a las enfermedades pulmonares de largo plazo, incluyendo la bronquitis crónica y el enfisema pulmonar. Mientras una persona continúe fumando, el riesgo de padecer alguna de estas enfermedades aumenta de manera significativa; además, estas empeoran con el paso de los años y no existe cura.

Para tratar estos padecimientos sólo existen algunas terapias que permiten mejorar la calidad de vida, pero no que solucionen el problema de raíz, ya que hasta el momento la medicina no ha podido desarrollar tratamientos capaces de regenerar los tejidos de los pulmones y recuperar la función pulmonar. Una de las terapias que mejores resultados ofrece es la oxigenoterapia a través de un concentrador de oxígeno portátil o de cilindros tradicionales.

¿Qué es la terapia de oxígeno?

El oxígeno es un gas que constituye alrededor del 21% del aire que hay en el medio ambiente, es necesario para alimentar al torrente sanguíneo y a los tejidos vivos que lo necesitan para proporcionar energía al cuerpo. Sin el oxígeno suficiente, las células funcionan de forma deficiente y terminan por morir. Las enfermedades pulmonares reducen la cantidad de oxígeno en el torrente sanguíneo.

En todos estos casos la administración de oxígeno adicional es la mejor manera de disminuir los efectos provocados por las enfermedades pulmonares. La concentración de oxígeno que un paciente debe recibir al someterse a una terapia de oxígeno tiene que ser mayor al 21% que hay en el ambiente, por lo que es necesario que se utilicen aparatos especiales que concentren altas cantidades, en promedio un 96% de oxígeno para que las células se mantengan en buenas condiciones. La concentración de oxígeno puede variar y para ello el médico debe hacer algunas pruebas y análisis que le permitan determinar cuál es el flujo necesario.

¿Cuándo es necesaria la terapia de oxígeno?

Las personas que fuman terminan por padecer enfermedades pulmonares crónicas y cuando su padecimiento atraviesa por momentos críticos, entonces necesitarán de la terapia de oxígeno para evitar que la concentración de O2 en la sangre disminuya y se generen problemas de salud graves.

La terapia de oxígeno a largo plazo ayuda a que los pacientes que tienen concentraciones de oxígeno muy bajas incrementan su esperanza de vida. En estos casos, lo mejor es tener una fuente de oxígeno portátil porque necesitarán el tratamiento durante varias horas al día si es que quieren tener mejores resultados. Cuando un paciente tiene enfermedad pulmonar crónica y utiliza el tratamiento con oxígeno por periodos de hasta 12 horas diarias, su tiempo de supervivencia aumenta significativamente respecto a los pacientes que no se someten a la terapia.

El uso de oxígeno a largo plazo permite disminuir la dificultad respiratoria y reducir el sobreesfuerzo cardíaco que causa la enfermedad pulmonar. Además, la calidad del sueño y la capacidad para realizar actividades físicas moderadas mejoran de forma significativa. Algunas personas que fuman sólo presentan niveles de oxigenación bajos durante la noche, por lo que utilizar el oxígeno solo durante ese periodo es también una opción viable que les ayudará a tener una mejor calidad de vida.

¿Qué dispositivo utilizar para la terapia de oxígeno?

Los concentradores de oxígeno son dispositivos modernos que proporcionan el gas en concentraciones de hasta el 98% a los pacientes que lo necesitan. Existen distintos modelos, como el Inogen One G3, uno de los más modernos porque comprime el aire que hay alrededor del paciente para entregarlo en una forma más pura. El suministro que proporcionan estos dispositivos es continuo y a diferencia de los tanques de oxígeno, nunca se agotará mientras la batería siga funcionando, ya que tienen un filtro de zeolita que es el encargado de purificar el aire del ambiente.

Para obtener los beneficios de estos equipos, es muy importante que acudan con un proveedor especializado como Inogen México, donde encontrarán los mejores dispositivos del mercado. Si desean más información respecto a nuestros dispositivos de oxígeno portátil, nos pueden escribir al correo electrónico info@inogenmexico.com o al WhatsApp +52 (55) 7667 1633.